Es curioso comprobar que no podemos controlar nada de lo que nos rodea. Pensamos que sí, pero en realidad no es así. Y también resulta interesante e inquietante ver cómo algo te llega dentro y analizar el por qué pasa en un determinado momento y no en otro. Da un poquito de miedo, la verdad. Todo ésto lo digo porque la escuché varias veces y tampoco me decía demasiado. Tarareaba su trabajo en Habitación en Roma, pero nunca llegó a trascender. ¿Por qué ahora sí? ¿Por qué, de repente, no puedo dejar de escuchar sus canciones? Russian Red. Una joya nacional. Para que luego digan que aqui no se hace música de calidad. A sus pies, señorita. Ha conseguido que me emocione con su maestría. LLegó para quedarse. Solamente puedo decir que me robó el tiempo.
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